Pulsa «Intro» para saltar al contenido

IPAL se compromete a una campaña limpia y a contar la cruda realidad a los alburquerqueños

Intervención de Jesús Martín, “Chuchi”

El acto de presentación de la candidatura de IPAL fue presentado por Raquel del Pozo y Pablo Bozas, dos grandes activos que van en los últimos puestos, lo que evidencia el extraordinario “banquillo” de esta formación independiente que cumple ahora 8 años de existencia. Pero es que cierran la lista como suplentes tres personas que serían ediles valiosísimos: Mari Cruz Mozo (ex colaboradora de AZAGALA), Mª Victoria Samino y Alberto Resmella. Éste último es un joven sensible socialmente y comprometido que resumía en un escrito reciente lo que es IPAL: “Las dudas y las leyendas negras que algunos se encargaron de cosechar durante unos años se han reducido a palabras vacías, difamación. Manolo, Alicia, Raquel, Javi y Chuchi han demostrado, con su trabajo y dedicación durante tan sólo doce meses, que otro Alburquerque es posible. Y hablo en presente porque lo otro ya es pasado. Un Alburquerque vivo, dialogante, abierto y preocupado por sus vecinos”.

  El primero en tomar la palabra fue el gran “fichaje” de los independientes, Jesús Martín, “Chuchi”, quien hizo un repaso por la labor que ha desempeñado en este año como concejal y terminó pidiendo transparencia en las palabras más “envenenadas” de un acto en el que IPAL huyó de la confrontación con las otras dos candidaturas: “Queremos paz social o verdad. Yo tengo claro que, sin verdad, no tenemos paz social”, y tronó la sala en una de las ovaciones más cerradas de la noche.

Intervención de Alicia García

  Le siguió en el turno de palabra Alicia García, una edil como la copa de un pino que se ha encargado del área más complicada del ayuntamiento: Economía y Hacienda. Dijo con rotundidad que Alburquerque demostró el 10 de mayo del año pasado, día en que triunfó la moción de censura que desalojó del poder al vadillismo, que “quiere progresar y salir del pozo en el que lo dejaron”; y terminó señalando que “si queréis, seguiremos aquí dándolo todo”.

  Manuel Gutiérrez tomó el testigo y, aclamado por los presentes, salió a la palestra dispuesto a decir verdades, muy dolorosas, y lo hizo conscientemente, mostrando así lo que es posible que sea el eje de la campaña de IPAL: explicar al pueblo sin rodeos que la situación es gravísima, valga como ejemplo que ya en 2026 el ayuntamiento tendrá que pagar de un golpe un millón doscientos mil euros como consecuencia de los múltiples créditos que pidió Vadillo para seguir en la poltrona.

  Gutiérrez habló de “campaña limpia, sin guerras de guerrillas” y dijo que “aquí hay alguien que ya ha perdido las elecciones”, en referencia al vadillismo. “Vamos a estar tranquilos a partir de ahora y que cada cual vote a quien le dé la gana, sin obligación de ir a los mítines porque ya nadie pasará lista”, añadió, e incidió: “Se acabaron las listas negras, el sectarismo, los despidos” … Y ya lanzado, remató: “se terminó el entramado de intereses y negocios oscuros a la sombra del poder”.

  El candidato de IPAL a la alcaldía pidió una “amplia mayoría para poder conseguir nuestras reivindicaciones” y recordó, de manera implícita, que hubo un compromiso por parte del gobierno regional en el sentido de que habría una solución económica para el ayuntamiento, basada en la reunificación de todos los créditos, que suman más de 11 millones de euros, en uno solo a pagar a muy largo plazo, con el fin de que el consistorio pueda respirar. Esa promesa no se ha cumplido por ahora, y Gutiérrez pidió unidad para retomar esa exigencia después de las elecciones. Así, aseguró que, aunque ganen las elecciones ofrecerán entrar en el gobierno al PSOE de Prieto y al PP de Paniagua.

  Respecto a los créditos que pidió Vadillo, señaló que casualmente aquel alcalde no pagó ni una sola cuota y nada más entrar el nuevo gobierno ya tuvo que pagar la primera: 250.000 euros; en este 2023 tiene que abonar –“de una sola tacada”, advirtió- un total de 487.000 euros: “y no sé cómo lo vamos a hacer”, señaló con pesadumbre. Siguió explicando la realidad con total crudeza y transparencia: “Hasta 2042 estaremos pagando deudas con bancos y en 2026, de una sola tacada, tenemos que pagar 1.200.000 euros”.

 Gutiérrez señaló que “todo esto va a condicionar los años venideros y tenemos que ser todos conscientes de ello”, e insistió en que hay que buscar acuerdos para resolver la situación. “Solo unidos podemos hacer frente a esto”, terminó.

Impactos: 38

Sé el primero en comentar

    Deja una respuesta

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *