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El valor de las imágenes escolares para analizar la historia de la escuela (3)

ELÍSABETH GARCÍA ROMÁN

Para hacer una investigación en este campo tenemos que observar grandes cantidades de documentos gráficos sobre educación –en España casi exclusivamente fotografías-, determinar el contexto en el que se tomaron en términos de espacio, tiempo y autor, así como el uso que el fotógrafo pensaba dar a la imagen. En cuanto a si éste último es aficionado o profesional y si el contexto es público, semipúblico o privado, hay una serie de fuentes documentales inexploradas, como son:

-Las fotografías de revistas de información gráfica, muy abundantes desde mediados del siglo XIX y en las que aparecieron miles de imágenes escolares elaboradas por los pioneros del reporterismo. Ejemplos: Nuevo Mundo, Blanco y Negro. Otras aparecidas en publicaciones pedagógicas como los Boletines de Educación editados por las inspecciones provinciales a partir de 1933, en los que aparecían los logros educativos de la República; y en el franquismo, la revista Mundo Escolar, que divulgó muchos artículos de escuelas urbanas y rurales.

-Las fotografías encargadas por organismos oficiales, principalmente el Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, los ayuntamientos, diputaciones y la Generalitat de Cataluña.

-Las fotografías realizadas por profesionales que en muchos casos se publicaron en revistas ilustradas y en otros se divulgaron de manera privada. Las escolares son en su mayoría fotos de grupo en el exterior de la escuela.

-Las fotografías de memorias escolares, conservadas en archivos de centros privados y públicos, realizadas con motivos propagandísticos y publicadas con motivo de alguna conmemoración especial.

-Las fotografías realizadas por los profesores e inspectores y las tomadas por los propios alumnos o los padres.

  En cuanto al trascendente papel otorgado al fotógrafo en el análisis de la imagen, en lo que se refiere a su trayectoria, intención, estilo e ideología, entre otros condicionantes, coincido con la autora del texto de referencia (María del Mar del Pozo) en que la trayectoria o el estilo artístico del fotógrafo solo son importantes cuando estamos ante una obra que el autor hizo libremente, lo que no era habitual. Esto es así porque si, como era usual, realizó el trabajo por encargo de una institución o publicación, el fotógrafo se adaptaría en gran medida a los objetivos de los contratantes.

  A menudo se ha descrito por parte de los investigadores españoles de la historia de la fotografía la miseria de los primeros fotógrafos ambulantes, poco interesados en retratar las problemáticas sociales, y la alineación de los que tenían su estudio en ciudades con el ideario ético y estético de la burguesía, por lo que tampoco captaban las realidades negativas.

  Una vez organizado el archivo de imágenes y clasificado de acuerdo con criterios que nos faciliten al menos una información mínima del contexto cronológico y espacial de la imagen (fecha, autoría, pública/privada, y uso original que se le iba a dar a la foto), se puede anotar elementos como la composición, estilo y género.

  Posteriormente la forma habitual de análisis por parte de los historiadores es la contemplación de la imagen de manera intuitiva tras muchos años de visualización y de conocimiento del contexto histórico en el que están tomadas las imágenes.

  Finalmente, el análisis visual debe concluir con el último sitio de producción de significado de las imágenes y en el que pueden ser vistas por distintas audiencias. El estudio, desde una perspectiva histórica, se desarrolla en varios niveles. El primero corresponde a los grupos que vieron la fotografía en el momento en el que se tomó. El segundo es el de las audiencias actuales, incluyendo a los propios investigadores.

   María del Mar del Pozo expone una aplicación no explorada, pero que sería sorprendente porque tocaría el mundo de las emociones, sería la combinación de los elementos iconográficos con las historias orales.

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PORTADA: Escuelas de la Dehesa. El maestro es José Antonio Cortés, padre de Elías, colaborador de AZAGALA. Es del año 1963.

FOTOS 2, 3, 4: Imágenes de escolares en Alburquerque.

FOTO 5: Escolares vacunándose.

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