El acto de entrega del distintivo de Hijo Predilecto de Alburquerque a Luis Landero fue entrañable y ameno, y la conversación entre el escritor e Isabel Gemio no tuvo desperdicio alguno, demostrando ambos que son dos alburquerqueños dignos de ser respetados y reconocidos, y decimos ambos porque la leyenda negra creada contra la citada periodista es tan injusta como perjudicial ha sido para Alburquerque. Nuestro pueblo podría haberse aprovechado hace 25, 20, 15, 10 años… de la enorme popularidad de Isabel Gemio, cuando estaba en la cima del éxito y cualquier noticia sobre ella acaparaba revistas y medios de comunicación nacionales. Sin embargo, fue proscrita y marginada a pesar de las voces que pedían un reconocimiento público a su figura, entre otros esta revista o el propio Manuel Gutiérrez públicamente lo exigimos, pero ni el gobierno local ni las personas que llevaban la cultura en Alburquerque quisieron escucharnos. Ahora es fácil clamar por un homenaje cuando se le negó durante un cuarto de siglo.
El acto de ayer empezó con la deliciosa voz de Gema Benítez, quien interpretó una bella canción acompañada a la guitarra por David Álvarez. Siguieron las presentadoras de la ceremonia, Luciana Pintor y Ángela Robles, trazando una semblanza de Landero y Gemio. Y luego llegó el sentido discurso de Gutiérrez, quien agradeció al alcalde Juan Carlos Prieto que firmara un decreto nombrándole alcalde en funciones con el fin de que fuera él quien entregara el distintivo a Landero.
Manuel Gutiérrez explicó el proceso seguido para el nombramiento como Hijo Predilecto de la Villa al escritor alburquerqueño, discurso que pueden seguir en el enlace que aparece en esta noticia. El apreciado edil alburquerqueño entregó al final el distintivo al también querido hijo de este pueblo nuestro.
Luego subieron al escenario Luis Landero e Isabel Gemio, quienes, tras romper el hielo, comenzaron un diálogo memorable, en parte en forma de entrevista de la periodista al escritor. Ella introducía los temas a tratar y hablaron siempre de Alburquerque, de sus infancias aquí, de sus recuerdos, sus vivencias, sus primeros amoríos, de los motes, de las familias, de los ricos y los pobres de antaño, del acertado discurso de Landero clamando contra el abandono de Extremadura en el caso del tren, del estado en que se encuentra Alburquerque, de las entrevistas de Isabel al escritor en diversos medios de comunicación… Fue algo tan sensacional que podría haber durado tres horas sin que nadie se removiera en su asiento. (Parte del diálogo entre ambos puede verse pinchando en el segundo enlace de esta noticia).
Al terminar, la edil delegada de Festejos y Cultura y el “alcalde verdadero” -como presentó Luci Pintor a Juan Carlos Prieto- entregaron dos obsequios a Isabel Gemio y Luis Landero, con lo que terminó tal vez el acto más hermoso que se ha visto en la casa de cultura que lleva el nombre del escritor alburquerqueño.
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