La presentación de Luis Antonio Paniagua como candidato del PP a la alcaldía supone un paso más en el relevo generacional del partido en Extremadura, algo que se aprecia claramente en la foto final de un acto en el que vimos entusiasmo y ganas. Allí estaba Javier Gutiérrez “Guti”, presidente comarcal, joven cercano y con proyección; Manuel Naharro, presidente provincial, hombre campechano, sencillo, con experiencia en la gestión municipal; Víctor Píriz, dialogante, abierto y llamado a estar entre los “primeros espadas” del PP nacional y Paniagua, emprendedor, comprometido con Alburquerque y el cambio para un pueblo próspero, libre y unido. Todos ellos acompañados de dos personas que han dado la cara en momentos duros y ahí siguen: Margarita Robles y Manuel Arce. Pero es que entre los asistentes había una persona, excelente alcaldesa, de ese PP regenerado en la región que representa Tina Rodríguez.
Luis Paniagua es el primer candidato que presentan los populares para las elecciones de mayo de 2023 y Víctor Píriz ha querido con ello dar un puño en la mesa y mostrar que aquí están los populares ya dispuestos a entrar con fuerza en la corporación. Vamos a ver el equipo que acompaña a Paniagua para esa difícil tarea. No será por falta de apoyo, porque con Píriz a su lado el camino será más fácil.
La presentación a cargo del diputado nacional y portavoz de presupuestos del PP que ayer publicamos ha sido vista ya por 1.053 personas y no vamos a repetir sus palabras, que en todo caso sirvieron para reafirmar su compromiso con Alburquerque, algo que también con hechos y no con palabras ha demostrado Naharro, quien lleva 4 meses como presidente provincial y ha estado ya ese mismo número de veces en nuestro pueblo. Recordó que en Valencia del Monbuey, donde es alcalde, el PSOE gobernó muchos años y fue una “tiranía”, pero el cambio se logró hace 24 años y desde entonces gobiernan los populares.
Entre vítores y aclamado con pasión salió Paniagua al estrado y, al contrario de lo esperado, habló con tranquilidad, con un discurso bien trenzado y coherente que vemos íntegro arriba. Animó a Ipal, dos de cuyos concejales, Gutiérrez y Blázquez, asistieron al acto en un gesto amable que debería ser la norma en el futuro, a luchar juntos por el cambio y contrastó el Alburquerque del pasado, cuando era envidiado fuera y la gente hablaba de Contempopránea, el Festival Medieval, su patrimonio, su gastronomía, su riqueza ganadera… y ahora cuando se nombra al pueblo solo recuerdan sus escándalos, la situación de los empleados municipales, su ruina más absoluta…
“Vamos a trabajar para que Alburquerque renazca igual que el ave Fenix”, fue una de sus frases más certeras porque, efectivamente, nuestro pueblo ha quedado reducido a cenizas y de ahí tiene que salir algo nuevo y distinto. “Hay que sacarlo del fango en el que se encuentra”, añadió, y es que ese ayuntamiento está de “mierda” (y perdone el lector la palabra) hasta el cuello. Luego citó a Churchill, un líder victorioso en tiempos de guerra que jugó un papel importante en la defensa de la democracia liberal europea contra la expansión del fascismo, y qué es lo que hay en Alburquerque, sino tiempos de lucha y un gobierno con tintes totalitarios, que ha abolido la democracia en el pueblo al eliminar los plenos, robando así la soberanía al pueblo al puro estilo fascista.
Luis Antonio Paniagua terminó con otra frase rotunda: “Dejemos de ser prisioneros de nuestro pasado; hoy me convierto en el arquitecto del futuro”.
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Portada. De izquierda a derecha: Margarita Robles, Manuel Arce, Víctor Píriz, Luis A. Paniagua, Manuel Naharro y Javier Gutiérrez
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