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La noticia del abandono del cercón de la dehesa levanta ampollas en Alburquerque

La exclusiva publicada por la revistaazagala.org acerca del estado de abandono del “cercón de la dehesa” comunal ha levantado ampollas. Han sido numerosos los cazadores que nos han felicitado por hacernos eco de una situación que lleva años produciéndose y varios vecinos de Alburquerque han lamentado la gestión que está haciendo el ayuntamiento de unas tierras que son de todos los alburquerqueños, tierras de las que solo se están preocupando de verdad los miembros de la Sociedad de Cazadores.
Esta revista digital ha publicado esta noticia gracias a algún ganadero y a varios cazadores que ha denunciado estos hechos penosos y vergonzantes. Hemos de aclarar que ningún miembro de la Junta Directiva de la Sociedad se ha dirigido a nosotros, pero todos los aficionados a la caza de Alburquerque conocen esta situación desde hace años. Además, el pasado viernes día 29, se celebró asamblea de la Sociedad de Cazadores y se informó a los presentes de la
situación del cercón de la dehesa. Pero como suele ocurrir en este pueblo nuestro, todo el mundo calla, y cuando algún medio se atreve a sacar a la luz estas cosas, resulta que la culpa es de ese medio. Y si no, al tiempo…

Según nos han informado esta misma mañana, el ayuntamiento, lejos de asumir su culpa y poner remedio, está ya cargando contra nosotros por boca de nuestro alcalde, quien, según nos ha hecho saber una persona cercana al gobierno local, está dispuesto a “mandar a llamar” a los miembros de la Directiva de la Sociedad de Cazadores, para “leerles la cartilla”, y culparles de que la noticia haya salido a la luz pública. Los vecinos de Alburquerque tienen derecho a saber lo que ocurre con los bienes que son comunales y de los que, desgraciadamente, no se benefician. Mucha gente luchó por los Baldíos y algunos lo pagaron con su vida o con la cárcel, para que ahora se encuentren con que la zona de mayor riqueza ecológica sirva para que campen los furtivos y para que algunos se aprovechen de la leña y la vendan, o para que pierdan los jornales que podrían ganarse sacando el corcho.
Nuestro alcalde nos acusa de hacer política, y señala a la Directiva de la Sociedad de complicidad, cuando ninguno de sus miembros ha hablado con esta revista, y cuando informar a los vecinos de la VERDAD (con mayúsculas) no es hacer política, sino ser justos y transparentes, algo vital en una democracia. Desgraciadamente, en este pueblo nos hemos
acostumbrado a que cuando diariamente se publican noticias ensalzando la figura del alcalde no se hace política, pero cuando uno alguien se atreve a contar las cosas que desgraciadamente ocurren, pero se ocultan, le echan en cara que “hace política”. Al igual que la edición impresa de AZAGALA, esta revista digital publicará las noticias positivas
y las negativas, y seremos como el niño que se atrevió a gritar que el rey iba desnudo, a pesar de que todos los demás, que le veían en cueros, no solo no osaban decirlo, sino que aplaudían el traje tan hermoso que supuestamente llevaba el monarca.

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